El ‘Plan de Infraestructuras Educativas 2018-2025’ elaborado por el Gobierno de Canarias y contemplado en un documento que fue presentado el pasado 29 de noviembre por la entonces consejera de Educación y Universidades, Soledad Monzón, el cual fija las inversiones prioritarias para los próximos ocho años en Canarias, refleja la construcción de 20 nuevos colegios e institutos así como la ampliación de otros 10 en la comarca Sur de Tenerife comprendida entre Fasnia y Santiago del Teide.
El Plan, que incluye un total de 130 obras y 23.000 nuevas plazas escolares en ocho años en todo el Archipiélago, tiene una inversión prevista de 507 millones de euros de los cuales 154 millones están destinados a Tenerife y, concretamente, 101 a la mencionada comarca Sur con los que se pretende dar respuesta al boom migratorio que viene experimentando la misma desde hace años y que no se ha visto correspondido por unas infraestructuras educativas acordes con ese vertiginoso crecimiento poblacional.
De los 20 centros de nueva construcción en el Sur, 11 corresponden a Centros de Educación Infantil y Primaria (CEIP’s), de los que dos se construirían en Granadilla de Abona, uno en Charco del Pino y otro en El Médano; seis corresponden a Institutos de Educación Secundaria (IES), de los que dos se llevarían a cabo en Granadilla de Abona, uno en El Médano y otro en San Isidro; y el resto corresponde a Centros de Formación, de los que uno se edificaría en Granadilla de Abona, concretamente un Instituto de Formación Profesional (IFP).
En cuanto a las 10 ampliaciones previstas, tres de ellas se desarrollarían en centros de Granadilla de Abona, concretamente en el CEIP Los Abrigos, el IES El Médano y el IES Magallanes de San Isidro.
“Hay razones objetivas para que la mayor parte de las inversiones programadas en el Plan vayan al Sur, sobre todo por el fuerte crecimiento poblacional que ha experimentado esa comarca, lo que obliga a construir nuevos centros y a ampliar los existentes”, indicaron fuentes de la Consejería de Educación y Universidades, que señalaron como prioritarias la realización de instalaciones para la escolarización obligatoria del alumnado (entre 6 y 16 años), aunque también “las enseñanzas necesarias dirigidas a la excelencia” en materia de formación.
NECESIDAD APREMIANTE
Desde la Dirección General de Centros e Infraestructura Educativa destacaron que “existe una necesidad apremiante de poner al día al Sur, que sufre una carencia histórica por falta de previsión debido al aumento de población que ha desbordado los planes”. Con la aplicación de este programa “el Sur se colocará en la vanguardia de las infraestructuras educativas del siglo XXI ya que, además de las actuaciones contempladas en este Plan, se beneficiará de un importante trozo de la tarta regional de 88 millones de euros destinada a la realización de obras de mejoras en accesibilidad, comedores escolares y retirada de amianto”, indican desde la Consejería.
Sin embargo, para que las cantidades destinadas a este Plan se vean reflejadas en los Presupuestos que la Comunidad Autónoma aprueba cada año, la Consejería advierte que es “imprescindible” que el Gobierno central transfiera los 42 millones anuales aprobados durante la etapa de Gobierno de Mariano Rajoy para financiar este ‘Plan de Infraestructuras Educativas de Canarias’, que a la fecha de su presentación todavía se continuaba a la espera de recibir.
Del total de las instalaciones previstas para construir en el Sur por el Plan, hay dos largamente demandadas que ya están en desarrollo. Una de ellas es el nuevo IES de Guaza, un centro de 680 plazas distribuidas en 22 aulas que estará finalizado a finales de 2019 y que acabará con el tristemente célebre instituto de los barracones que lleva funcionando ‘provisionalmente’ desde hace 15 años. La otra instalación que se está construyendo es el Centro Integrado de Formación Profesional de Adeje, primero de estas características en el Sur, cuyo plazo de ejecución está previsto para finales del primer semestre de 2020.