« Estimado director:
El pasado jueves 27 de junio se celebró Pleno del Ilustre Ayuntamiento de Granadilla de Abona, el cual tenía carácter extraordinario si bien los puntos que en el mismo se trataron no ofrecían ninguna singularidad para nuestra vida, la de los ciudadanos, que lo justificara, salvo la de conocer quienes serán los responsables de las áreas y a su vez los salarios que recibirán por dedicarse a la tarea de resolver nuestros problemas y servirnos (libre y voluntariamente).
No obstante y dicho lo anterior a modo de ironía, entiendo, o mejor dicho, sé, que el carácter del Pleno no obedece a la importancia de las materias sino más bien a la forma que el mismo se convoca y desarrolla, así como los asuntos a tratar. Dicho esto y conociendo su medio y la dedicación que hace a la política de nuestro municipio, es por ello que me pongo en contacto con usted a fin de exponer lo que bajo mi punto de vista es, por un lado, una ‘incongruencia’ del Sr. Alcalde y, por otro, una ‘falta de respeto’ hacia la ciudadanía.
El punto primero que se trató, y por tanto supongo que el más importante para el Alcalde y su equipo, incluso más que sus salarios, fue el cambio de hora de los Plenos municipales. Al final y como era de esperar, se aprobó cambiar la hora para celebrar los mismos, que pasa de las seis de la tarde a las once de la mañana de cada último jueves de mes, volviendo de este modo al horario que en otro tiempo se llevaban a cabo.
Paso a resumir el desarrollo de dicho punto:
Tras la introducción del Alcalde con la lectura del título del mismo, éste da la palabra a la portavoz del Grupo de CC, la cual defiende la propuesta del grupo de gobierno de cambiar el horario de los Plenos a las once de la mañana con el objetivo de facilitar la tarea a l@s concejales y de evitar inconvenientes a los empleados públicos que han de estar presentes. Aclaro que hay que tener en cuenta que estos empleados públicos que tienen que estar presentes en los Plenos suelen ser el Secretario, el Interventor y agentes de la Policía Local.
Por su parte, la portavoz del grupo Socialista en su turno de palabra argumenta que se oponen a ese nuevo horario de mañana por la dificultad que el mismo entraña para poder asistir tanto a los concejales de la oposición como a los ciudadanos, que sin embargo lo tendrían más fácil si los Plenos siguieran celebrándose en horario de tarde.
En cuanto al grupo Mixto, conformado por Partido de la Ciudadanía (Ciudadanos) y Sí Podemos Granadilla, que defendían la misma postura que los socialistas, su portavoz (el concejal de Cs) le recordó al Sr. Alcalde unas manifestaciones realizadas por él mismo en la pasada legislatura en un momento anterior a su mandato en las que exponía los inconvenientes que suponía asistir en horario de mañana a los Plenos por parte de los concejales de la oposición (se dirigía al Alcalde recordándole su experiencia de cuando él estaba como tal), así como que dijo que bajo su mandato, sí así ocurriera en alguna ocasión (lleva ejerciéndolo desde la segunda parte de la anterior legislatura y, especialmente, ahora), no se pondrían los Plenos en horario de mañana.
Intervino el Alcalde para defender el cambio de horario alegando que dada la aprobación del Reglamento de Participación Ciudadana, cuyo impulsor ha sido su gobierno con él al frente, sólo por ese hecho está garantizada la participación de la ciudadanía. A dicho Reglamento hizo referencia en varias ocasiones mostrando un especial orgullo. Y casi al finalizar su intervención dice algo que, bajo mi personal visión, resulta pueril desde el punto de vista humano y censurable desde el punto de vista político, y es el hecho de indicar que respecto al horario de los Plenos, puesto que cuando él lo pidió estando en la oposición y el gobierno socialista no quiso cambiarlo para ponerlo por la tarde, ahora él tiene derecho a hacer lo mismo.
Mientras observaba el desarrollo de este punto (como es lógico, no pueden esperar que los ciudadanos aceptemos de buen grado ser convidados de piedra) me asaltaron unas ganas terribles de intervenir. De hecho, si hubiera sido miembro de la corporación yo creo que habría roto la disciplina. No obstante y tal como dice el mencionado Reglamento de Participación Ciudadana (aunque en el mismo no se dice la forma) indiqué con un gesto al Sr Alcalde mi intención de participar, siendo su respuesta un gesto de negación con la cabeza. No obstante pensé que se debería al momento, pues recordé que el Reglamento indica que las intervenciones son al final del Pleno, así como que las mismas no pueden ser alegatos sino preguntas. El resto del Pleno me entregué a desarrollarlas en mi cabeza de manera que al formularlas expresara realmente lo que quería.
El tiempo restante del Pleno no puedo negar que se me hizo insufrible, pues frente a la convicción de que tenía que participar, entre nervios y dudas me entregué a construir dos preguntas que, aunque largas, pudieran ser formuladas y resueltas en los tres minutos que el Reglamento establece, las cuales vienen a ser:
1ª) Señor Alcalde, ¿no considera usted que las sociedades que consiguen prosperar son aquellas en las cuales entre sus ciudadanos se comparte la responsabilidad en la acción política de la gestión de lo público a través de la participación, para lo cual antes es necesario que se instale la cultura de la participación y que ésta viene dada de la mano de la educación, siendo un instrumento eficaz la asistencia a los Plenos por ser ésta la cámara legislativa más próxima al ciudadano y que, por contra, el desplazarlos a este horario de la mañana en lugar de conseguir lo primero lo que conseguirá es mantener el actual desapego y casi desprecio que la mayoría de los ciudadanos siente hacia la política en general y hacia los políticos en particular?
2ª) Por otro lado, ¿cree usted que tras oír el montante de los salarios que van a percibir por prestarse a servirnos a los ciudadanos, los vecinos de Granadilla tenemos como prioridad facilitarles la tarea cuando este cambio de horario que el grupo de gobierno propone lo que consigue es crearnos complicaciones, y que más bien con los argumentos que emplea el efecto que consigue es enfadarnos? ¿O puede que lo que en realidad encierra es un desprecio hacia nosotros, siendo este ‘nosotros’ todos aquellos a los que usted suponga que no piensan como usted, considerando que dado que ya entre todos le hemos dado el voto, tiene ya usted cuatro años para campar a sus anchas y hacer lo que quiera al margen de ‘nosotros’? ¿Sabe usted que a esto se le llama tiranía y que viene siendo la segunda parte de la definición de demagogia? Además, ¿no cree que la actitud revanchista que se desprende de sus palabras de justificación resulta cuanto menos mezquina?
Bien, pues una vez llegado el Pleno a su final y tras reiterar mi intención de formular las anteriores preguntas, el Alcalde me lo negó de nuevo con la cabeza y dio por finalizado definitivamente el Pleno.
En un principio pensé que se debía al carácter ‘extraordinario’ del mismo el hecho de que el Alcalde me negara la posibilidad de intervenir, no obstante y aunque en su día leí el Reglamento de Participación Ciudadana, como tenía serias dudas sobre este punto un amigo me facilitó una copia del Reglamento General del Ayuntamiento en el cual no encontré nada sobre la participación de los ciudadanos en los Plenos, pero después tuve ocasión de consultar en su web de ‘LaRendija.es’ el ya citado Reglamento de Participación Ciudadana, el cual en su artículo 27.2 recoge que los ciudadanos podremos formular preguntas al finalizar los asuntos del Pleno (esto sí lo recordaba) y, en el siguiente, que corresponde al alcalde o alcaldesa abrir el turno de palabra. En ningún caso se cita que el carácter del pleno (‘ordinario’ o ‘extraordinario’) condiciona el desarrollo de este derecho de los ciudadanos, así como tampoco se establece la forma en que los ciudadanos han de pedir la palabra, ni el momento de hacerlo, sino que más bien lo deja abierto a la gracia del alcalde o alcaldesa. No obstante, no hay que confundir lo dicho con el artículo 27.1 del Reglamento en el que se refiere a los casos en que los ciudadanos desean intervenir sobre un asunto concreto y que han de solicitarlo por escrito al Alcalde con cuarenta y ocho horas de antelación, siendo autorizado o denegado motivadamente por éste.
[Nota de LaRendija.es: Quien tenga interés en consultar dicho Reglamento, puede acceder al mismo pulsando en el siguiente enlace: https://larendija.es/el-reglamento-de-participacion-ciudadana-del-ilustre-ayuntamiento-de-granadilla-de-abona/]
Una vez hecha esta lectura, realmente no puedo decir que el Alcalde haya incumplido el Reglamento, pero lo que sí puedo decir es que hace un uso muy interesado y propagandístico del mismo.
No obstante y pensando en no acusarlo de mala fe, si que me gustaría que nos aclarara cuáles serán los criterios para aplicar este punto del Reglamento y, a modo de sugerencia, que al comienzo del Pleno dejara claro si se dará la opción de formular preguntas al final del mismo y por tanto desarrollara dicho punto, con lo que los ciudadanos tendríamos la opción de crear las preguntas que estimemos pertinentes formular o, en caso contrario, decidir ser un convidado de piedra, pero esto ya será una decisión personal. De este modo habrá claridad y transparencia sin que quepa la menor posibilidad de duda sobre la voluntad del Alcalde. Otra cosa será que se mantengan opiniones distintas.
Así pues, dicho lo anterior y sin nada más que añadir, agradezco al director de este medio la publicación de la presente.
Atte.:
Pedro A. Ibáñez »