Sobre el ‘Día de la Madre’

7 May, 2015 | Sociedad | 0 Comentarios

El Día de la Madre o Día de las Madres es una festividad que se celebra en honor a las madres en todo el mundo y en diferentes fechas del año según el país. En muchos de estos países el Día de la Madre se conmemora en el mes de mayo pero, cada lugar, según su tradición, lo celebra en una fecha determinada. En España se celebra el primer domingo de mayo.

El Día de la Madre es un día muy especial en el que es tradición que tod@s l@s hij@s le hagan un regalo a su madre como muestra de su amor hacia ella. Es una bonita manera de decir a nuestras madres que las queremos, aunque para ello evidentemente no es necesario esperar al Día de la Madre puesto que cualquier día es idóneo para ello.

Las semanas previas a esta celebración, l@s niñ@s en la escuela dedican unas horas al día a preparar un regalo para sus madres ayudad@s de sus profesores. El Día de la Madre, l@s hij@s le hacen un homenaje especial a sus madres escribiéndoles mensajes diciéndoles que la quieren, haciéndoles un poema, mandándoles sus flores favoritas o una caja de bombones, obsequiándolas con un desayuno o un día en el SPA…

La madre es donde primero acudimos l@s hij@s cuando tenemos problemas, quien sin preguntarnos sabe lo que nos pasa y siempre podemos contar con ella. Por más errores que cometamos en nuestras vidas, siempre estará ahí para recibirnos de nuevo. Porque como se suele decir ‘madre no hay más que una’.

Por eso, se merecen más que una flor, un perfume o un regalo. Se merecen que cada día les demostremos cuanto las queremos y que les digamos lo importantes que son para nosotros. Por eso, todos los días son el Día de la Madre.

¿POR QUÉ SE CELEBRA EN FECHAS TAN DIFERENTES?

El Día de la Madre es percibido por muchos sólo como un día ‘comercial’, sin embargo esta celebración es mucho más antigua de lo que pensamos, pues ya existía para honrar a las progenitoras -terrenales y espirituales- de todo el mundo antes de que la fiebre consumista llegara hasta nuestra rutina diaria.

Lo cierto es que el ‘baile’ de fechas en esta celebración viene precisamente dado por la falta de información sobre el origen de la misma. Y es que para encontrar la primera fecha en el calendario utilizada para celebrar este día, hay que remontarse bastantes siglos atrás.

Existen indicios de que ya en Egipto honraban a las progenitoras, aunque simbolizada en la diosa Isis, que representa la maternidad y la fuerza fecundadora de la naturaleza. Estas celebraciones se mantuvieron también en la antigua Grecia con la diosa Rea, así como en el Imperio Romano que honraba a la Diosa Cibeles.

Día de la Madre (foto mamá y bebé)

Quizás por eso, y a pesar de que el popular refrán asegura que «madre no hay más que una», la celebración del Día de la Madre no se realiza en la misma fecha en todos los países. Así, aunque en España el Día de la Madre actualmente se celebra el primer domingo de mayo, no siempre ha sido así, pues mucho antes de que la celebración adquiriera un marcado carácter comercial, ya existían desde el siglo XIV cofradías creadas en honor a la Inmaculada. Por eso, inicialmente, las madres eran homenajeadas el día de esta Virgen.

Uno de los primeros países en separar la celebración de la Inmaculada y el Día de la Madre fue Estados Unidos, tendencia que acabaría llegando a España en 1965, que es cuando se decide que el Día de la Madre se celebrará el primer domingo de mayo, fecha que aún se mantiene.

El resultado es que a lo largo de todo el planeta, esta celebración dedicada a nuestras progenitoras es una de las que más ‘baila’ en el calendario mundial, pues El Día de la Madre se conmemora en veinte días diferentes, siendo el mes de mayo el elegido para recordar a sus madres lo especiales que son en la mayor parte de los países, en total 55 incluida España.

A pesar de que las fechas no coincidan, lo cierto es que los tradicionales regalos que se acostumbran a hacer en el Día de la Madre son bastante similares en todo el mundo. Las flores -siendo el clavel y la rosa los grandes protagonistas-, los bombones y sobre todo las cosas hechas a mano con mucho cariño son los tres elementos que más se repiten entre los hijos de todo el mundo. Y es que las grandes y copiosas comidas familiares, así como los regalos forman parte de la tradición de este señalado día; una tradición que muchos vinculan directamente con intereses comerciales.

LA HISTORIA

Según los expertos, en la antigua Grecia ya se celebraba el Día de la Madre; una fecha que además se utilizaba para honrar a la diosa Rea, la madre de los dioses Zeus, Poseidón y Hades en la mitología griega y diosa de la fertilidad.

Igualmente los romanos llamaron a esta celebración ‘Hilaria’ cuando la adquirieron de los griegos. Se celebraba el 15 de marzo en el templo de Cibeles y durante tres días se realizaban ofrendas.

Honrar la maternidad también fue característica de las culturas que poblaron Mesoamérica antes de la Conquista. Una de ellas, la azteca, rendía culto a la madre de su dios Huitzilopochtli, la diosa Coyolxauhqui o Maztli, que era representada por la Luna.

Los indígenas rendían especial tributo a esta diosa y dedicaron a ella hermosas esculturas en oro y plata, que no sólo revelan su profundo sentido artístico sino la importancia tan grande que ellos concedían a la maternidad.

Los festejos a la maternidad entre los aztecas eran de carácter sacro. Peregrinar desde distintos puntos del antiguo México para honrar a Tonatzin, era un acto de comunión cósmica y una ceremonia de reconocimiento a la propia madre.

Estas celebraciones antiguas las transformaron los católicos para honrar a la Virgen María, la madre de Jesús. En su santoral, el 8 de diciembre se celebra la fiesta de la Inmaculada Concepción, fecha que adoptaron los católicos para la celebración del Día de la Madre.

Día de la Madre (a la mejor mamá del mundo)

En Europa, los antecedentes del Día de la Madre se remontan al siglo XVII en Inglaterra, donde el origen de esta fecha también tiene relación con la Virgen. En ese tiempo, debido a la pobreza, una forma de trabajar era emplearse en las grandes casas o palacios, donde también se daba techo y comida.

En esta época el cuarto domingo de Cuaresma, que se denominaba Domingo de las Madres, se utilizaba para honrar a la virgen María y era una fecha reservada para que los siervos y empleados volvieran a sus lugares de origen para visitar las iglesias en las que habían sido bautizados, las iglesias «madres».

Esa ‘vuelta a casa’ significaba además ir a visitar a sus madres bien pertrechados con regalos, flores y pasteles con los que poder agasajarlas. Esta celebración se desarrollaba colectivamente en bosques y praderas.

Aunque los colonos ingleses que emigraron a Estados Unidos intentaron mantener la celebración del Día de la Madre en Estados Unidos, ésta acabó cayendo en desuso durante muchos años y fue la activista y poetisa Julia Ward quien lo reavivó en 1870 cuando escribió un apasionado llamamiento a la paz y al desarme titulado Proclama del Día de la Madre.

Julia Ward organizó una gran manifestación pacífica y una celebración religiosa a la que invitó a todas aquellas madres que hubieran perdido a alguno de sus hijos en la guerra, una conmemoración que se mantuvo en Boston durante un par de años hasta que acabó cayendo en el olvido al no calar en la conciencia de los norteamericanos.

Fue otra activista, Anna Reeves Jarvis, la que años después conseguiría afianzar la celebración del Día de la Madre en Estados Unidos. En 1907 ésta inició una fuerte campaña a nivel nacional para conseguir que esta conmemoración se instaurase oficialmente el segundo domingo del mes de mayo, fecha en la que había fallecido su propia madre.

A partir de entonces, Anna encabezó una activa campaña que fue extendiéndose a todo el territorio de los Estados Unidos. Después de un arduo trabajo y de pedir a través de carta a numerosas personalidades e intelectuales influyentes del país para que apoyasen su petición, en el año 1910 el país entero decidió celebrar su Día de la Madre.

Finalmente, el presidente Woodrow Wilson declaró en el año 1914 el Día de la Madre como el segundo domingo de mayo en Estados Unidos. Así fue gestado el Día Internacional de la Madre que después fue encontrando eco en otros países que lo adoptaron hasta tenerse la celebración conocida en la actualidad.

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